Este es un ritual muy simple, y es fácil de realizar para todos.
Debería funcionar para las personas que tienen pesadillas repetitivas (los niños también).
Un amigo mío informó que le ayudó con el insomnio.
Necesitas para este ritual para detener las pesadillas:
Una vela blanca (no grande).
Una cinta blanca o plateada (debe ser lo suficientemente larga para que quepa en tu muñeca).
Cualquier pieza de plata, como un objeto hecho de plata que no lleves constantemente encima o con el que duermas. Puede ser un anillo que no lleves, o una taza de plata, incluso una cuchara de plata.
Cómo hacer el ritual para detener las pesadillas:
Siéntate en la oscuridad de tu habitación.
Pon la cinta alrededor de la vela, enciende la vela y ponla en un lugar opuesto a tu cara.
Observa la llama encendida durante un par de minutos y relájate.
Ahora cierra los ojos e imagina bellas escenas que, en tu mente, estén relacionadas con emociones de felicidad y paz.
Puede ser cualquier cosa. (Es algo muy individual.)
Medita durante el tiempo que desees.
Cuando te sientas relajado y capaz de concentrarte en una sola cosa, acércate a la ventana, sosteniendo la vela encendida en tus manos y mirando la Luna.
Si no puedes verla desde tu ventana, o desde cualquier otra ventana de tu casa, o ni siquiera desde el patio, sigue ahí de pie y luego sólo mira el Cielo.
Di estas palabras:
«La Luna es mi amiga
que me escucha
y trae la belleza
a mis sueños.
Las estrellas están aquí
para brillar siempre
trayendo serenidad
y la paz de la mente.
Cuando cierre los ojos
no se habrán ido
manteniéndome a salvo
hasta el amanecer».
Puedes repetir estas palabras tantas veces como quieras, si lo consideras necesario.
Después, apaga la llama (si la vela no se ha consumido).
Quítate la cinta y ponla alrededor de tu muñeca antes de irte a la cama.
Deja la vela y un trozo de plata en tu ventana hasta la mañana siguiente.
Por la mañana, quita ambos y la cinta de plata de tu muñeca.
Puedes repetir este ritual de 1 a 3 veces por semana, utilizando siempre una vela y una cinta nuevas. Sin embargo, recoge las cintas.
Cuando sientas que tus pesadillas han desaparecido y te has librado de ellas, puedes seguir haciendo este pequeño ritual una vez a la semana.
Se puede hacer en cualquier noche de la semana.
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